Correr es una de las actividades deportivas más recomendadas por médicos y terapeutas, para aquellas personas que buscan no sólo mejorar su apariencia física sino, también su salud emocional.
Salir a correr es una excelente manera de reparar tanto el cuerpo como la mente, haciendo que nos olvidemos de preocupaciones y que nos invada una sensación de euforia en la el esfuerzo se combina con el placer.
Salir a correr para sanar la mente
Correr durante 20 o 30 minutos es suficiente para que todo nuestro cuerpo quede involucrado en una tarea que requiere que varias partes de nuestro organismo se coordinen. A partir de esta barrera temporal de alrededor de media hora después de haber empezado a correr es cuando se notan los beneficios psicológicos y físicos de este tipo de deporte.
¿Cuáles son los beneficios que correr tiene para nuestra mente?
- Reduce el estrés y la ansiedad, refresca la gestión de tus pensamientos, mantiene la mente libre de preocupaciones.
- Mejora tu estado anímico, cuando te ejercitas, el cuerpo produce una sustancia llamada endorfina, que provoca que las personas estén felices y de buen humor.
- Mejora la memoria, incrementa la producción de cédulas del hipocampo que son responsables de la memoria y aprendizaje.
- Mejora la autoestima, el ejercicio físico puede elevar la percepción positiva del atractivo de uno mismo.
- Desarrolla la concentración, la mente se entrena para enfocar y concentrarse.
- Combate la adicción, terapeutas lo prescriben como apoyo para superar adicciones.
Correr puede mejorar nuestras funciones cognitivas, e independientemente de la edad o de la condición física, los estudios han demostrado que dedicar un tiempo para el ejercicio también produce muchos beneficios para nuestro bienestar mental. ¡A correr!